Beatriz Esteban nos traslada a la isla justo antes del declive, justo antes de que desaparezca para siempre y lo hace con una novela de fantasía autoconclusiva, aunque larguita, con unos personajes que os van a cautivar y con algún que otro plot twist que os sorprenderá.
Pero antes de empezar... ¿os gustan las sirenas buenas o las malas?
En el palacio vive Elayne la princesa. Nadie puede verla más que una vez al año, y es que la reina lleva tiempo protegiéndola de un posible peligro, pero la princesa está a punto de descubrir algo que le hará huir de palacio.
En los anillos exteriores viven los otros dos protagonistas de la historia. Ambos llegaron al Nido cuando se quedaron huérfanos.
Allí Aiden ha creado un hogar para todos ellos, es algo así como una casa de acogida.
Bell en cambio, no sabe de dónde ha llegado, tiene algunos recuerdos inconexos y la extraña sensación de no pertenecer a la isla pero nada más.
Durante la novela iremos descubriendo las historias de los tres personajes, qué ha vivido cada uno para llegar al punto en el que estamos a la vez que sus caminos se van entrelazando en su inevitable final.
Bea además ha creado un sistema de magia muy original ya que la ciudad (y la isla) se nutre del Aura, eso es lo que proporciona energía para que todo funcione, la sociedad es un matriarcado y además, como no podía ser de otra manera, hay sirenas. Sirenas temidas que mantienen un pacto con los atalantes.
Así que si estáis buscando una historia de fantasía que os sorprenda y os haga disfrutar, con magia, sirenas y muchos secretos, no lo dudéis más y pasad por la Libroteca a echarle un ojo a «El ocaso de la reina».
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