La cámara se ha reunido porque no pueden esperar más a que el príncipe Nolan despierte. Él es el heredero al trono de Estela pero lleva años dormido y las esperanzas de que despierte empiezan a escasear.
El rey Fobos lo ha intentado todo, sus métodos han ido incluso más allá de la línea moral, pero él es un rey y nadie en Estela puede impedirle tomar esas decisiones.
Por suerte, o por desgracia, ahora el rey necesita la aprobación de la cámara para que sea su hija, Reira, quien se convierta en la heredera al trono de Estela.
Allí descubriremos el arte de los palacios mentales, iremos conociendo diferentes elementos de la mitología propia que se desarrolla en este mundo y sobre todo, nos enamoraremos de los personajes.
Vale, es verdad que de alguna más que de otros. Pero todos ellos están magníficamente creados y bien definidos.
Otro punto a favor es el worldbuilding. Creo que Alba ha creado un mundo super original que sorprende al lector pero a la vez ha sabido lograr que el lector no se sienta perdido y lo sienta como real. A eso, sin duda, colabora la pluma de la autora tan onírica como se merece esta saga.
Allí, en palacio será donde iréis descubriendo alianzas y traiciones, donde los plot twist de la trama os dejarán con la boca abierta y donde el romance os va a mantener con el corazón en vilo.
Porque esta novela es una historia de fantasía, con unos reinos, unos dioses y unos gremios perfectamente creados, originales y sorprendentes pero también es una historia donde nada es lo que parece y todo se reduce a lo que somos capaces de hacer por amor.
Por la familia, por nosotros mismos o por la persona que queremos...
Porque cuando conozcáis a los personajes de esta saga, sus debilidades y sus fortalezas os enamoraréis tanto de ellos como de la bellísima forma de escribir de Alba.
Ya estamos deseando leer la continuación y descubrir mucho más sobre Lópreni y Nevásile.
Por no hablar de las ganas que tenemos de saber qué va a pasar ahora con ciertos personajes.
Esperamos que el cronista escriba muchos éxitos para Alba.
