Hace unos días terminamos de leer «Clementine» de Clara Cortés, justo después de haber terminado «Pájaro azul» su anterior libro y con el que cerraba una trilogía que nos ha gustado mucho. Y bueno, lo que os tenemos que decir es que...

¡Tenéis que leerlo!

En esta novela Clara se ha superado, de verdad. Siempre nos ha parecido que escribe muy bonito, que tiene la capacidad de convertir en arte cualquier situación, por cotidiana que sea, y si sumamos eso a que sus libros tienen ese aura de tristeza que te golpea el corazón... pues eso, se convierte en una de nuestras autoras preferidas. 

Pero es que en esta ocasión, no sólo ha logrado hacernos sentir tanto como en cada libro, sino que ha conseguido que la historia sea todavía más bonita. 

En «Clementine» conocemos a una chica que lleva años en una relación tóxica que le ha llevado a perderse hasta tal punto que ni se reconoce. 

Lleva años viviendo con su pareja en una casa que nunca ha sentido como suya, justificando a su novio con sus amigas cada vez que éste le pone impedimentos para quedar con ellas y pasando por alto muchas de las reacciones que tiene él cuando se enfada sin motivo. 

Clementine no es consciente de hasta qué punto esta situación le está afectando. 

Quizá el hecho de que su madre considere que Mark es el novio perfecto y que en la relación entre madre e hija nunca ha existido el amor, hace que Clementine considere que esta relación es todo a lo que puede aspirar. 

Sus amigas llevan mucho tiempo intentando ayudarla pero no terminan de encontrar la manera. 

Todo esto cambiará el día que aparezca Blythe.

Desde el día que se cruzan por primera vez, Clementine no puede dejar de pensar en ella y son muchos los nuevos sentimientos que se despiertan en su interior. 

Como podéis imaginaros volverán a coincidir y empezarán a compartir muchos momentos. Entre ellas surge una gran conexión. 

Blythe se convierte así en un gran apoyo para Clementine que empezará a darse cuenta de que la vida que tiene no es lo que quiere y que ella se merece ser la protagonista. 

Blythe es un personaje que nos ha gustado muchísimo. La forma que tiene de ayudar a Clementine, de hacerle sentir importante y de hacerle entender que para estar bien con los demás hay que estarlo con uno mismo, nos ha enamorado. 

Los personajes secundarios también son increíbles, y como nos ha pasado con el resto de sus novelas, creemos que muchos de ellos se merecerían poder contar su historia (sigo queriendo un libro de Rachel).

La edición es una maravilla. Como habéis podido observar la cubierta es preciosa, en ella aparece Clementine, y como nos contó Clara aparece en segundo plano, como si no fuera ni siquiera protagonista de su propia historia y con los ojos cerrados porque no se ve. 

Además en el interior encontraréis pequeñas ilustraciones, en este caso, realizadas por la autora, con algún objeto con importancia en ese capítulo. 

Pese a que el estilo de Clara es totalmente reconocible en esta novela, sentimos que la autora ha dado un paso más y en una dirección que nos encanta. Por eso, sin lugar a dudas esta historia se ha colocado entre nuestros libros favoritos y nuestras mejores lecturas. De ahí que nos pongamos serias y os pidamos que lo leáis. 

Si nos vais a hacer caso, podéis pasar por la Libroteca a por el libro y marcapáginas preciosos o pedirlo desde la web y os lo enviamos a casa, también con marcapáginas, no os preocupéis. 

El libro tiene un PVP de 17,50€