Creo que hacen falta más libros como éste en la literatura middle grade.
Una novela que aborda la orientación sexual de forma natural, realista y muy conmovedora.
Un tornado ha arrasado con muchas de las casas del pueblo, entre ellas la casa de Ivy.
Su familia lo ha perdido todo.
La nueva situación es difícil para todos, pero especialmente para nuestra joven protagonista.
Ella se siente invisible y en cierto modo desplazada. Por si esto fuera poco, Ivy ha perdido su cuaderno de dibujos. Un cuaderno muy especial para ella ya que en él se esconden sus secretos más íntimos.
Alguien ha encontrado el cuaderno y le va devolviendo poco a poco alguno de los dibujos mientras intenta que Ivy se abra y comparta sus miedos con alguien.
Mientras la familia de Ivy intenta volver a la normalidad, buscar un lugar para vivir y empezar de nuevo, ella conocerá a una mujer que le servirá de apoyo y con quien se sentirá cómoda compartiendo sus miedos aunque en muchas ocasiones no necesite decírselo con palabras.
Además, la nueva situación permite que nuestra protagonista se acerque más a June, una compañera del colegio que poco a poco se irá convirtiendo en alguien muy importante para ella y para la historia.
Es un libro que he disfrutado muchísimo porque además de que la historia es muy tierna, la autora lo narra de una forma muy bonita.
Una vez que terminas la novela y te "despegas" de la protagonista, puedes llegar a entender mejor la situación y a cada uno de los personajes.
Sin duda todo un logro de la autora.
No esperéis encontrar un libro con mucha acción, aunque es verdad que no resulta nada lento, porque lo que vais a encontrar es un libro de personajes que buscan su lugar.
Los adultos intentando recuperar la estabilidad de su hogar y su familia y los jóvenes, o en este caso Ivy tratando de conocerse mejor y aceptarse.

Si os animáis a leer este libro, os aseguro que no os vais a arrepentir, podéis encargarlo a través de nuestro formulario "Pide tu libro".