Prometemos que no nos ha influido nada que Natasha haya trabajado como librera, ni tampoco lo ha hecho que la portada de "El relojero de Filigree street" tenga un hermoso reloj dorado que nos recuerda tanto al de nuestro amigo el conejo blanco. Esta novela tiene muy buena pinta.
Nos situamos en Londres en 1883. Thaniel Steepleton se lleva una gran sorpresa al regresar a su casa: alguien le ha dejado un reloj de oro en la almohada. Pero Thaniel, tiene otros asuntos más importantes que averiguar quién le ha dejado tan fantástico regalo entrando en su casa... Trabaja como telegrafista en el Ministerio del Interior y acaba de recibir un cable anunciando un atentado.
Emprende la búsqueda del dueño del reloj cuando la alarma de éste le salva de una explosión que destruye varios edificios. Así conoce a su creador, Keita Mori, un japones amable y solitario que domina los secretos del tiempo y le llevará a un mundo nuevo, delicado y misterioso.
Por otro lado, Grace Carrow, una joven estudiante dedicada a la física se cuela en la biblioteca de Oxford disfrazada de hombre, antes de que su madre le obligue a buscar marido.
Las vidas de estos tres personajes se cruzarán en la novela dándonos a conocer qué les une pero también qué les separa.
Os dejamos un fragmento de la novela para que os terminéis de convencer de que ésta es vuestra próxima lectura.
